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| Leneida y yo en nuestro aniversario 14. Fue el 3 de Junio. Ella es buena compañera. |
Como Pablo (1 Timoteo 1:12-17), empiezo este
reporte dando gracias a Dios por darme el privilegio de ser su hijo y de
servirle en su obra, a pesar de mi pasado pecaminoso y de mi imperfecto y
muchas veces poco fervoroso presente. No tengo más que agradecer, honrar y
alabar a Dios por su buena voluntad para conmigo y para con mi familia. Dios es
bueno (Lucas 18:18-19), bueno, bueno. Nunca puedo dejar ver a Dios así. Su obra
de salvación a través de Jesús, su obra santificadora por medio del Espíritu
Santo y su diario cuidado providencial me maravillan. Solamente me queda amarle
y servirle de todo corazón. A continuación, un resumen de lo que Dios me ha
permitido realizar en Junio:
Ministerio
a favor de mi iglesia local. Nuestro
pastor tiene el objetivo de que nos acerquemos y que conozcamos mejor a los
misioneros que apoyamos y a la obra que ellos realizan. Yo estoy muy contento
con esta meta e iniciativa. Mi contentamiento es mayor porque se me dio el
privilegio de visitar a dos de nuestros misioneros: El misionero Teodoro Berna,
quien ministra en Chepén y el misionero Luis Escobar, quien ministra en
Tarapoto.
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| El misionero Teodoro Berna, su niño y su esposa. |
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| Los hermanos de la IB La Esperanza junto a los de Chepén. |
A Teodoro Berna y su familia lo visitamos
varios hermanos de nuestra iglesia. En total, fuimos 13 personas. Todos lo que
viven en mi casa participaron de esta visita. Dimos nuestro testimonio,
alabamos a Dios y compartimos la palabra de Dios con la familia misionera y los
hermanos de esta nueva iglesia. También, tuvimos un tiempo de compañerismo con
el misionero Teodoro y su familia. Fue muy edificante participar en este viaje.
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| El misionero Luis Escobar, su esposa y yo en su hogar. |
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| Mi esposa, mi hijo Noé y Luis Escobar y su esposa. |
A Luis Escobar y su familia lo visité cuando
fui a Tarapoto. Me encontré con él y con su esposa y fui hasta su casa. Mi esposa
y mi hijo Noé me acompañaron en esta visita. Me entusiasmó el testimonio y el
trabajo de este misionero. Él está trabajando con pocos recursos, pero en un
año de trabajo tiene ya una congregación que oscila entre 15 a 20 personas. Su
trabajo es un reto para mí y para otros. Si se quiere hacer la voluntad de Dios
y se trabaja, Dios bendecirá y dará fruto. Pido oraciones a favor de este
siervo y su familia.
En Junio, nuestra iglesia auspició y fue sede
del Congreso Misionero MEBIP. Nos preparamos para hospedar y alimentar a los
directivos, a los misioneros y a los delegados que son parte de esta misión.
Gracias a Dios, él proveyó suficientemente. Los hermanos de nuestra iglesia y
de otras iglesias abrieron sus casas y dieron ofrendas para este
acontecimiento. Es hermoso cuando los hijos de Dios muestran su aprecio por la
obra de Dios en esta manera. Las clases, las predicaciones y las alabanzas
fueron muy motivadoras. Los servicios nocturnos fueron muy concurridos. No
había espacio suficiente para todos dentro de nuestro local. Hemos sido muy
bendecidos y desafiados con este congreso. Mi esposa y otras damas de la
iglesia trabajaron duro en el congreso. Doy gracias a Dios por ellas y por
todos los que sirvieron a Dios sirviendo a sus siervos durante esos días. Ayúdennos
con sus oraciones para que el fruto del este congreso se acreciente y que hayan
más obreros y más iglesias comprometidas con la gran comisión.
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| Los misioneros de MEBIP. Oremos por ellos siempre. |
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| Los misioneros, el almuerzo y la comunión. |
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| El predicador y la congregación, listos para la palabra. |
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| Tuvimos una buena asistencia cada noche. Dios nos bendijo con su palabra. |
Ministerio
en Santa Rosa, en Shambuyacu, Bellavista, Tarapoto. Fui hasta este pueblo junto a mi esposa y a
mi hijo Noé. Para Noé, fue su primer viaje de ministerio. Él tocó la guitarra
en los servicios y ayudó al maestro de los niños con las canciones y las
clases. Mi esposa enseñó a las mujeres y yo enseñé a los hombres y prediqué en
la noche. Fue nuestra segunda vez con los hermanos de este pueblo. La iglesia
en el pueblo fue formada por el hermano Santos García. Yo conozco al hermano
Santos desde el año 1988, que fue el año en que empecé a predicar. Lo conocí en
el pueblo de Ochamé, en Moyobamba. Santos se movió desde Ochamé a Santa Rosa
hace ya unos 8 años atrás. Cuando llegó, vio que había que predicar el
evangelio. Cuando empezó a predicar, Dios bendijo su ministerio y hoy hay una
iglesia floreciente en ese alejado pueblo del Perú. Dios bendiga al hermano
Santos y a los que son como él. Es por creyentes como el hermanos Santos que el
reino de Dios y el evangelio de Jesucristo se extiende y seguirá extendiéndose.
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| Mi hijo Noé y yo cantando un himno. |
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| Enseñando cómo casarse en el Señor a los jóvenes. |
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| Mi esposa enseñando a las camas. |
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| El hermano Santos García y su nieto. Dios lo bendiga y siga usando en su obra. |
Ministerio
a favor del Seminario Bautista del Perú. Sigo enseñando y dirigiendo el área de Relaciones Públicas del SBP.
Terminé de dictar mi curso de Vida de Jesucristo y mi curso de Síntesis
Doctrinal. Todos mis alumnos aprobaron los cursos. Eso me alegra. El Seminario
tiene cursos de extensión en Sullana. Los cursos se dictan durante 8 horas cada
tercer sábado del mes. Esta vez me tocó enseñar a mí. Enseñé un resumen de
Historia de la Iglesia y los principios bíblicos básicos para edificar una
buena familia. Por favor, sigan orando por mi ministerio en el SBP. En el segundo
semestre del año enseñaré el libro de Hechos. También, oren por mi trabajo de
promover el ministerio del SBP entre las iglesias. En Sullana, presenté nuestro
ministerio en tres iglesias. Estoy contento de que las iglesias aprecian, oran,
ofrendan y envían alumnos a formarse en nuestra institución.
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| Presentando el ministerio del Seminario a las iglesias. Dios bendiga este ministerio. |
Acción
de gracias.
1. Agradezco a Dios por su salvación a través
de Jesucristo y por su constante cuidado misericordioso.
2. Agradezco a Dios por el privilegio de
servirle y por las oraciones, ofrendas y oportunidades ministeriales que me dan
sus hijos.
3. Agradezco a Dios por mi esposa y por mis
hijos, quienes cada día están creciendo y cooperando conmigo en el ministerio.
4. Agradezco a Dios por el ministerio del
Seminario Bautista del Perú y por los pastores, misioneros, hermanos e iglesias
que oran, ofrendan, envían estudiantes y dan oportunidades ministeriales a
nuestra institución.
Atentamente,
Segundo Rodríguez
